Luis Francisco Pérez
Espacios de significado
La invitación que me hace llegar Chus Tudelilla para hablar de mi «mesa de trabajo» me produce una doble sensación, o una doble interpretación. Ciertamente ambas emociones serían innegablemente placenteras, si bien cada una posee su propio registro, digamos «defensivo», y su natural argumentación, digamos «defensora». Veamos si yo mismo soy capaz de expresarme con la limpieza y orden que para ello se necesita, y no siempre se consigue, en toda «mesa de trabajo», y la insistencia en el entrecomillado no sería debido a un melindroso prejuicio de querer a toda costa «curarme en salud», pero sí a la humana precaución, con no poco de distanciamiento brechtiano, que se necesita cuando una determinada idea u opinión surge de una invitación externa, y no por la íntima necesidad o gusto personal de expresarla sin mayor motivación que nuestro propio deseo.