Miriam Reyes
Traducción de Huelga general. Antología
Estoy traduciendo, que es como decir: me estoy volviendo loca. La traducción todavía es una selva oscura para mí. A menudo me pregunto: cómo llegué aquí y, cómo saldré de esta. Además, mi mesa es un debate abierto conmigo misma. En el eterno dilema entre la literalidad y la libertad creativa en la traducción vacilo entre lo que me gustaría hacer como traductora y lo que me gustaría que hicieran conmigo si fuera yo la traducida. Al final, la empatía y el respeto por el trabajo del otro me llevan a ceñirme, tanto como mi lengua me lo permite, al original.
Ana Merino
Pensar el cómic: construcciones analíticas y posibilidades teóricas
Entre los proyectos que en la actualidad ocupan mi mesa de trabajo está la recopilación de algunos de mis artículos académicos sobre cómic y novela gráfica que cubren tres importantes áreas de estudio y ofrecen diferentes modelos de análisis: La identidad nacional como espacio analítico y de representación dentro del cómic; en este caso se tomarán ejemplos argentinos, estadounidenses y españoles. La construcción de lo femenino y los cómics de género como vertiente expresiva en modelos norteamericanos. Y el peso de la novela gráfica y el mercado editorial y sus posibilidades teóricas en el espacio expresivo del contexto español.
Juan José Olives
Notas sobre la música degenerada en el Tercer Reich
El contenido de la mesa de trabajo que la librería y galería de arte La Casa Amarilla de Zaragoza me propuso, coincide con al menos dos iniciativas que, sobre el mismo o similar tema, me van a mantener en gran parte ocupado en los próximos meses. La primera responde a la invitación de una revista de especialización musical de ámbito nacional a escribir en sus páginas un artículo sobre «música degenerada» y la Segunda Escuela de Viena. La segunda trata de la confección de un programa de conciertos para la próxima temporada de la Orquesta de Cámara del Auditorio de Zaragoza, Grupo Enigma, sobre los compositores del Holocausto. Siendo distintas son, sin embargo, confluentes, no en el arte y la música sino en la fatal oscuridad de la locura y la barbarie del nacionalsocialismo.