El paseo. Intervenir la ciudad
Entre las actividades organizadas con motivo de la exposición El paseo. Intervenir la ciudad figura el ciclo «Ante la imagen», a cargo de quienes nos han brindado sus paseos, haciendo con ellos ciudad. Porque estamos convencidos de que pasear, un acto tan sencillo, es una estrategia social y política que nos permite pensar, reflexionar, debatir, interrogar y proponer nuevas posibilidades a explorar para pensar y restaurar la ciudad.
Lina Vila. La tinta y la hierba
Tiempo para la reflexión. Eso es lo que se reclama en el ciclo «Ante la imagen» que acompaña a las exposiciones de La Casa Amarilla. Un tiempo necesario para mirar, ver y saber las obras en compañía de especialistas en las más diversas disciplinas cuyas reflexiones nos ayudarán a situarnos ante las imágenes. O, al menos, a interrogarlas.
Para su exposición en La Casa Amarilla, Lina Vila ha pintado un jardín. Qué mejor motivo para celebrar los veinticinco años que han pasado desde su primera exposición individual en 1992. Y para celebrar la memoria de su padre, Pedro Vila, que le enseñó a apreciar la naturaleza y las plantas. Su huerto era su paraíso. Ahora aquel huerto es el espacio utópico de Lina Vila. Los jardines, ha escrito Santiago Beruete, nos hablan de la nostalgia de lo que una vez fue y de lo que nunca podrá ser, de tal modo que la pasión que los seres humanos han sentido a lo largo de la historia por construir jardines, se fundamenta en el deseo de evadirse de la realidad y en el anhelo de retornar a la naturaleza. Lina Vila siente bienestar y equilibrio en el jardín de su casa y en el deseo de hacer permanentes esos sentimientos, lo pinta.
Nacho Bolea. Arsenal
Tiempo para la reflexión. Eso es lo que se reclama en el ciclo «Ante la imagen» que acompaña a las exposiciones de La Casa Amarilla. Un tiempo necesario para mirar, ver y saber las obras en compañía de especialistas en las más diversas disciplinas cuyas reflexiones nos ayudarán a situarnos ante las imágenes. O, al menos, a interrogarlas.
Debemos permitir que las imágenes atroces nos persigan, decía Susan Sontag, convencida como estaba de que aunque no consigan abarcar la mayor parte de la realidad a que se refieren, cumplen una función esencial: esto es lo que los seres humanos se atreven a hacer y quizá se ofrezcan a hacer, con entusiasmo, convencidos de que están en lo justo. No lo olvides.
Y Nacho Bolea toma nota en sus ensamblajes, collages y objetos. Los desastres de la guerra abren su exposición en La Casa Amarilla, para no olvidar, porque como recordó Sontag: recordar es una acción ética.
Javier Peñafiel. Tu extrema higiene
Tiempo para la reflexión. Eso es lo que se reclama en el ciclo «Ante la imagen» que acompaña a las exposiciones de La Casa Amarilla. Un tiempo necesario para mirar, ver y saber las obras en compañía de especialistas en las más diversas disciplinas cuyas reflexiones nos ayudarán a situarnos ante las imágenes. O, al menos, a interrogarlas.
«La actividad artística no es higiene», escribe Javier Peñafiel. «Tu extrema higiene es la insalubridad de otros», concluye el artista.
La vida instrucciones de uso
Tiempo para la reflexión. Eso es lo que se reclama en el ciclo «Ante la imagen» que acompaña a las exposiciones de La Casa Amarilla. Un tiempo necesario para mirar, ver y saber las obras en compañía de especialistas en las más diversas disciplinas cuyas reflexiones nos ayudarán a situarnos ante las imágenes O, al menos, a interrogarlas.
Georges Perec es el protagonista de la primera edición del ciclo «Ante la imagen»; y, por supuesto también, los artistas convocados a la exposición inaugural de La Casa Amarilla: La vida instrucciones de uso.